El análisis de estabilidad de laderas y taludes frente a cargas dinámicas producidas por eventos sísmicos se realiza habitualmente mediante el método de Newmark. Este método consiste en simplificar el deslizamiento a una geometría de un bloque apoyado sobre un plano inclinado. Sobre este se definen las ecuaciones de equilibrio pseudo-estático para la evaluación de la aceleración del bloque sometido a una aceleración sísmica en dirección paralela al plano de inclinación del bloque, desestimando los desplazamientos ladera arriba. Mediante la doble integración de la aceleración del bloque el método permite evaluar los desplazamientos acumulados ladera abajo producidos por la aceleración sísmica asumiendo la resistencia constante. En este trabajo se extiende el método de Newmark convencional con el objetivo de incluir: (a) la caída de la resistencia a corte de condiciones pico a residuales mediante una ley de reblandecimiento con la tasa de deformación, y (b) la presurización térmica en la banda de corte debido a la disipación del trabajo friccional en calor. La formulación es finalmente aplicada al caso del deslizamiento de Jiufengershan inducido por el terremoto de Chi-Chi ocurrido en la isla de Taiwán en 1999, el cual presentó una aceleración catastrófica y un recorrido aproximado de 1.5 km.